Las claves para mejorar la imagen de nuestra vivienda por dentro y por fuera1

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 La pandemia nos ha convertido en una sociedad indoor que cada vez pasa más tiempo en casa, y que se ha ido adaptando a la tendencia del cocooning, es decir, a hacer del hogar nuestro refugio, nuestra fortaleza. Una situación que, sin duda, se ha convertido en una gran oportunidad para el mercado de la reforma, pues hasta un 21% de los hogares ha realizado en estos meses alguna mejora en casa o planea hacerla, según datos del sector asegurador.

Y es que el incremento del tiempo que pasamos en casa y la necesidad de hacer de ella el lugar de trabajo habitual o el punto de encuentro con familiares y amigos ha despertado la necesidad de convertir el hogar en un lugar confortable, que se adapte a nuestras necesidades.

Decidirse a hacer mejoras en casa

Así, aunque ya hay muchas familias que se han decidido a realizar mejoras en casa, todavía hay muchas otras que se lo plantean, pero no llegan a dar el paso por las incómodas obras que se asocian a ellas. Sin embargo, a diferencia de lo que se suele pensar, hay mejoras que pueden conseguirse con rehabilitaciones sencillas que no implican molestas obras con las que se pueden obtener beneficios como un mayor confort interior o un aspecto renovado que puede incluso llegar a aumentar su revalorización hasta un 20%.

Eso sí, para hacer realidad ese “lavado de cara” de la vivienda es imprescindible contar con un buen equipo de profesionales que seleccione las mejores soluciones y que cuente con los productos técnicos esenciales para poner la casa a punto y mejore su imagen, tanto por dentro como por fuera.

Entre estas renovaciones sencillas se incluyen, por ejemplo, la mejora del aspecto de las fachadas frente a las grietas y las fisuras, presentes en el 99% de los edificios. Así se puede prevenir o poner fin al envejecimiento prematuro de los inmuebles, a la filtración de humedades, a la pérdida innecesaria de energía, a los aumentos en el gasto de la factura o a otros problemas más graves que incluso pueden dañar la estructura.

Pocos saben que su reparación puede ser además rápida, eficaz y económica, ya que existen soluciones de impermeabilización que restauran las fachadas sin necesidad de picar la pared e incurrir en la retirada de escombros.

Pero estas mejoras también pueden acometerse en terrazas, columnas, muros o en los pavimentos de sótanos y garajes. En cualquier caso, es importante saber que existen soluciones prácticas que se caractericen por su versatilidad, por su rápida y fácil aplicación y por su calidad y máximo rendimiento.

Porque situaciones que, a priori, pueden solucionarse de forma sencilla y económica, pueden convertirse con el paso del tiempo en anomalías graves y, por tanto, requerir obras más complejas y costosas. Por ello, conviene ponerles solución más pronto que tarde para que además de mantener el buen estado de nuestra vivienda podamos hacer efectivo el dicho de “como en casa en ningún sitio”.